La selenita es un mineral que psicológicamente potencia el juicio y la compresión. Mentalmente es una piedra fantástica para diluir la confusión y ampliar nuestra compresión. Es una gran estabilizadora de emociones erráticas. Es relajante y se recomienda a personas que padecen angustia y ansiedad aportándoles tranquilidad. Aporta seguridad para afrontar los problemas de la vida. Combate la tristeza y la melancolía.
La selenita alinea la columna vertebral y facilita la flexibilidad. Nos protege de ataques epilépticos. Invierte los efectos de los “radicales libres”. Es beneficiosa para tratar enfermedades que afectan al aparato respiratorio y protege los ovarios de quistes, calma los dolores menstruales. Estimula el funcionamiento del aparato digestivo, combate la halitosis, desintoxica células (invierte los efectos de los radicales libres que influyen en la aparición de las células cancerígenas).
La selenita se puede utilizar para proteger una zona de nuestra casa de malas influencias energéticas y también para prevenir cualquier influencia perniciosa externa sobre la mente.